Un buen modisto debe ser: arquitecto para los patrones, escultor para la forma, pintor para los dibujos, músico para la armonía y filósofo para la medida. Cristóbal Balenciaga
Sus principios fueron el rigor, la sobriedad y la perfección.
Es el único de nosotros que es un verdadero ‘couturier’ (costurero). Coco Chanel.
Cristóbal Balenciaga Eizaguirre (Guetaria, Guipúzcoa, 1895 – Valencia, de 1972), más conocido como Balenciaga, fue un prestigioso diseñador de moda español, considerado uno de los creadores más importantes de la alta costura, que desempeñó su trabajo principalmente en la ciudad de París donde se exilia durante más de tres décadas. Contemporáneo de Coco Chanel y Christian Dior, es el modisto de alta costura español más importante de la historia a partir de los años 50.
Tuvo un pleno dominio de la costura y del manejo de tejidos, posiblemente gracias a su madre, costurera de oficio.
Su mecenas y tutora fue la marquesa de Casa Torres.
Sus señas de identidad son tacón bajo, la falda por debajo de la rodilla y la manga tres cuartos.
Impuso un estilo totalmente innovador presentando una línea de hombros caídos, cintura pinzada y caderas redondas.
A partir de los años 50 empieza a ser reconocido y despliega toda su creatividad.
Manifestó predilección por los tejidos con peso, que se enriquecían con bordados a mano, lentejuelas o pedrería.
A finales de los 40 reinventó la silueta femenina con sus vanguardistas vestidos saco, las mangas tres cuartos, las faldas balón, el talle alto, las caídas en forma de túnica, y la manga murciélago, formas todas ellas sostenidas gracias a su magistal tijera y adornadas con grandes botones.
Destacan los vestidos negros, los abrigos cuadrados sin cuello ni botones, la manga japonesa, el vestido túnica o los impermeables transparentes.
Los colores fuertes de su infancia como el verde, el rosa o el rojo
Su habilidad en crear volúmenes y formas fue asombrosa; daba a las prendas un acabado perfecto, casi escultórico.
Le influyeron los grandes maestros de la pintura española, especialmente Velázquez y Goya, aunque sus modelos también muestran influencias cubistas.
Para muchos su concepto de mujer es más oriental que occidental, tiende a dejar la nuca al descubierto (muy erótico en Japón).
Se le considera el padre de la alta costura, nunca trabajó para Prêt-à-porter a excepción de los trajes de azafatas de Air France.
Su clientela era la aristocracia y la realeza; diseñó el vestido de la reina Fabiola de Bélgica.
En el taller de Cristóbal Balenciaga se formaron muchos modistos, algunos de los cuales alcanzarían fama internacional y llegarían a tener firma propia. Entre estos se cuentan Paco Rabanne, André Courrèges, Emanuel Ungaro, Hubert de Givenchy u Óscar de la Renta.
La marca Balenciaga sigue con sus bolsos, zapatos, complementos, etc.
Se retiró a finales de los 60.
Su obra se ha expuesto en varias exposiciones mundiales.
En Guetaria está el museo Balenciaga
Hubert de Givenchy, presidente de patronato de la Fundación Balenciaga, ha dicho de él: «Balenciaga fue el creador del arte de la alta costura. Elegante en su vida y en su obra, su pasión por la vida le llevó a convertirla en arte. Cada una de sus creaciones tuvo siempre algo de escultura, de música y de pintura, expresadas en trajes de impecable y serena armonía».
En el años 2001 el Grupo Gucci compra Balenciaga y a partir del año 2000 Nicolas Ghesquière relanza la marca Balenciaga.
La arquitectura experimenta profundos cambios en la primera mitad del siglo XX.
EVOLUCIÓN DESDE FINALES DEL XIX AL XX.
Surge un nuevo concepto estético: Lo funcional es bello; se produce la ruptura con lo clásico o con lo tradicional. Ahora la arquitectura es espacio interno. Desaparece todo el lenguaje plástico de la Antigüedad (columnas, entablamentos, arcos ciegos, etc.) La arquitectura desde el Barroco se había centrado principalmente en la apariencia, en causar sensación, y esto se logra dando gran importancia a las fachadas, descuidando, el espacio interior del edificio.
Construyen sobre todo viviendas. Hasta esta época la arquitectura tenía como principal objetivo, la construcción de palacios, iglesias…
El triunfo de las revoluciones industriales (I y II) dan lugar a la creación de ciudades enormes, con retos y necesidades que no tenían las antiguas: la arquitectura tiene que racionalizar el espacio urbano, hacerlo humano, construye principalmente viviendas integrada en un entorno nuevo: grandes avenidas, carreteras, ferrocarriles, áreas industriales… Ese cambio de estética se produce porque el mundo ha cambiado radicalmente, surgen problemas que no habían existido: masificación, construcción de aeropuertos, estadios de fútbol… y no había referencias anteriores que imitar.
Desde el punto de vista estético predomina lo útil, confortable y funcional. Los arquitectos se desligan del pasado y manejan volúmenes y espacios con criterios nuevos.
Dan prioridad a las estructuras- esqueleto: pilares y vigas sustituyen a columnas y arcos. Son jaulas que después se recubren facilitando la construcción bloques de pisos.
La línea recta se impone.
Los materiales predominantes son: hormigón armado, cemento, acero y vidrio.
La belleza radica en la armonía del edificio teniendo en cuenta la distribución del interior, el estudio de la luz, la habitabilidad (sonoridad, aislamiento, confort, etc.) el entorno.
Se prescinde de la decoración.
Hay dos corrientes:
La arquitectura funcional o racionalista
Walter Gropius (alemán). La Bahaus.
Mies Van De Rohe (alemán).
Le Courbusier (francés).
la arquitectura orgánica.
Franz Lloyd Wright
Otros arquitectos: Alvar Aalto, Oscar Niemeyer, etc
Fue la Escuela de arte más influyente de la historia. Pionera en unir técnica y arte al servicio de la Arquitectura. Cuna de la vanguardia arquitectónica Europea y occidental.
La Bauhaus cambió tres veces de sede, por eso podemos distinguir varias etapas:
1ª etapa: Weimar (1919-25): Gropius estuvo a cargo de la dirección hasta 1928. 2ª etapa: Dessau (1926-32) Entre 1926 y 1932 la Bauhaus se estableció en Dessau. Meyer era el director. 3ª etapa: Berlín fue la última sede (1932-33). Mies van der Rohe fue su director y con él pasó a ser una escuela privada.
La Bauhaus (escuela de construcción en alemán) es una escuela que surge en 1919 en Weimar, a 200 km de Berlín, fruto de la fusión de la Escuela de Bellas Artes y la Escuela de Artes y Oficios. Se unieron el carácter artesano y práctico de una con el carácter artístico de otra. Los temas principales de la enseñanza de la nueva escuela serían el diseño y la construcción de edificios. El primer director fue Walter Groupus
La importancia de esta escuela se debe a que de aquí salieron las vanguardias que dominarán el panorama arquitectónico europeo y muchos de los arquitectos con la llegada del fascismo emigrarán a los Estados Unidos y extenderán el estilo. Es la primera escuela de diseño donde los estudiantes realizan todo lo que proyectan.
Método de enseñanza
En el peculiar sistema de enseñanza de la Bauhaus se empezaba con un curso preliminar de seis meses que era muy importante, en esos meses tomaban conciencia de conceptos como: color, forma, volumen, textura… El sistema era revolucionario ya que el alumno aprendía por sí mismo e iba abandonando paulatinamente ideas preconcebidas. El alumno debía trabajar con una libertad total, sin condicionantes, y proyectar cosas adaptadas a la función específica para la que se iba usar. Después cursaban tres años en los que el alumno se formaba en un oficio concreto y posteriormente se estudiaba arquitectura y se obtenía la calificación de doctor. Gran parte de los profesores de la Bauhaus en el curso preliminar eran pintores: Kandinsky, Klee, Nagy era escultor… y casi todos los pintores que enseñaban a los alumnos habían pasado por varios estilos y llevaban influencias cubistas, expresionistas… Para llegar a ser arquitectos los alumnos pasaban por una formación muy completa en el aspecto estético. Desde el año 1924 encontramos en la Bauhaus un estilo ya maduro y con una personalidad peculiar.
Entrada elaborada por la alumna Marina Sánchez Font de 2º Bachillerato de Artes Escénicas.
Sir Alfred Joseph Hitchcock (Londres, 13 de agosto de 1899- Los Ángeles, 29 de abril de 1980) fue director de cine y productor británico. Pionero en muchas de las técnicas que caracterizan a los géneros cinematográficos del suspense y el thriller psicológico de actualidad; y uno de los más influyentes directores de la historia del cine.
Nació en el East End londinense, al final de la era victoriana, hijo menor de un comerciante y una devota ama de casa de ascendencia irlandesa. Educado por jesuitas, siempre fue un ávido lector, admirador de Oscar Wilde y G.K. Chesterton. Estudió ingeniería y se convirtió en dibujante industrial.
En 1920 obtuvo su primer trabajo en el cine, como diseñador e ilustrador de los paneles donde aparecían los títulos de las películas y los créditos, así como de los escenarios. En 1923, un director cayó súbitamente enfermo. Hitchcock lo sustituyó y terminó la cinta, y a partir de allí inició su labor como realizador.
Filmó cerca de 25 largometrajes en Inglaterra, entre ellos los muy estimables El hombre que sabía demasiado (primera versión, de 1934) y Los 39 escalones (1935).
En 1940, David O. Selznick, productor estadounidense, lo llevó a Hollywood para dirigir Rebeca, con Laurence Olivier y Joan Fontaine. El gran éxito del filme, ganador del único Oscar a mejor película en la carrera de Hitchcock, cimentó la reputación del director, aunque la verdadera fama llegaría tres años más tarde con La sombra de una duda.
Sus obras cumbres fueron: Psicosis, La Soga, Frenzy, Rebeca, Los pájaros, Crimen perfecto, Extraños en un tren, Recuerda, La Ventana indiscreta, Encadenados, Con la muerte en los talones. Vértigo. Enlace a fotogramas y trailers de las películas en el blog cultura colectiva. com (pincha)
LAS CLAVES DEL CINE DE HITCHOOCK
¿Por qué atrapa el interés del espectador y lo mantiene en tensión?
El cine es un espectáculo y el público es el destinatario
Los argumentos, siempre simples.
El sonido puede ser tan importante como la imagen: Hitchcock fue uno de los primeros en utilizar sonidos y música como recurso para introducir un elemento emocional o incluso informativo en una escena, o para introducir a personajes a los que no vemos en pantalla. Un ejemplo célebre sucede en Los pájaros, cuando los protagonistas están encerrados en una casa y sabemos que están rodeados por las aves, pero lo sabemos únicamente porque las escuchamos haciendo ruido en el exterior.
Otro ejemplo sería la escena de la ducha de Psicosis. Donde no solo influye la chirriante música, sino también el sonido de las puñaladas en el cuerpo de la chica. Hemos de mencionar que al principio esta secuencia no iba a tener música. Hitchcock no quería y se enzarzó en una discusión con el compositor Bernard Herrmann, que finalmente este último acabó ganando.
El peligro sucede en lugares insospechados.
El villano puede parecer perfectamente bueno.
No existen los héroes por naturaleza.
Una película es como un videojuego: Y eso que cuando Hitchcock murió los videojuegos modernos ni siquiera existían. Pero su uso de la cámara es muy similar al que podemos ver en diversos videojuegos, donde el jugador ve la acción en primera persona y a través de los ojos de su personaje. Fue uno de los principales desarrolladores de las técnicas de cámara subjetiva.
Los encuadres tienen un significado emocional: Pensaba en afectar al público pulsando sus emociones primarias —miedo, curiosidad, etc.— y no recurriendo a la emoción estética. Y para pulsar esas emociones básicas creía ciegamente en que se necesitaba utilizar un tipo de plano para cada situación emocional concreta. Así, los momentos de clímax emocional están caracterizados por encuadres inusuales (verticales, oblicuos, deformados, etc.) planeados para causar la desazón visual del espectador, o bien por planos muy cercanos para involucrar al espectador en la acción. (La muerte de una mujer en Topaz, cuando su vestido se derrama en poética metáfora de la sangre).
En cambio, los momentos tranquilos se caracterizan por planos mucho más horizontales y «bien» encuadrados, donde la cámara toma más distancia de la acción y donde la imagen es mucho más convencional, permitiendo que el espectador se relaje en su butaca al no percibir nada anormal.
El color también es un lenguaje: Hitchcock usaba los colores para establecer el tono emocional de una secuencia, pero también para centrar la atención sobre determinados objetos o personajes. El ejemplo más famoso sucede en Vértigo: durante la primera parte de la película están completamente ausentes de la pantalla dos colores básicos como el rojo y el verde. Aunque el espectador no lo sabe, su percepción subconsciente sí nota una falta de equilibrio cromático y eso crea una cierta desazón visual en el público, en consonancia con la desazón que siente el protagonista a causa de su soledad. El espectador, aunque inconscientemente y sin darse cuenta, busca los colores que están ausentes y no los encuentra. Sin embargo, cuando aparece por primera vez Kim Novak —objeto de la obsesión de James Stewart— lo hace vestida de verde y sentada junto a una pared de intenso color rojo. Esa repentina visión satisface tanto al protagonista, que encuentra el objeto de su obsesión, como al propio público, que se siente aliviado al ver por fin esos colores en pantalla.
Dios no juega a los dados: Hitchcock utiliza la casualidad o la mala suerte para poner al espectador al borde de su butaca, ya que vemos al protagonista en peligro pero sumido en una inoportuna situación cotidiana —que nada tiene que ver con la amenaza principal— de la que resulta difícil salir y que le está impidiendo conseguir aquello que necesita. En las películas de Hitchcock hay casi siempre una especie de dios malicioso que se encarga de gastarles bromas a los personajes, y cuanto más delicada la situación del personaje, más bromas de este tipo le gasta.
La importancia del contraste emocional: Para acentuar los momentos de clímax, afirmaba, se necesitaban secuencias que ejercieran como contraste humorístico. Algunas de sus películas comenzaban con un registro ligero y esa ligereza podía aparecer después en cualquier momento del metraje, de la manera más inesperada, y en ocasiones incluso introduciendo detalles irónicos en mitad de los momentos de acción más intensa.
El montaje es el principal arma del director
El director es el gran protagonista: Los cameos
El espectador debe tener más respuestas que preguntas:
La gente que miraba la pantalla debía tener mucha información, debía conocer aquello que podía sucederles a los protagonistas del film y debía saber dónde, cuándo y cómo acechaba el peligro. De lo contrario, lo que se obtiene es el efecto «susto», que dura apenas unos segundos, y no el efecto suspense, que puede prolongarse casi tanto como el director quiera. Mantenía únicamente un misterio o unas pocas preguntas sin responder, los mínimos para que la historia funcionase, pero el resto de respuestas se las entregaba al espectador de antemano.
Los objetos no son muy distintos de los actores: Hitchcock no primaba a los actores por encima de los objetos. Objetos inanimados e intérpretes humanos, ambos eran material de idéntico valor narrativo para la cámara. Fue de los pioneros al respecto.
La mujer ha de responder a un patrón determinado: Hitchcock era frecuentemente acusado de misoginia dado que en sus películas los principales papeles femeninos muy a menudo se prestan a una interpretación bastante retorcida: Una mezcla de profunda fascinación con una vena sádica que al parecer también mostraba en la vida real, al menos en lo referente a su negro sentido del humor. En el cine de Hitchcock, las mujeres solían ser extremadamente pasivas y vulnerables. Cabe señalar la obsesión del director con las mujeres rubias y con un físico refinado y elegante. Según Hitchcock, mujeres como las de sus películas —refinadas, altivas— escondían su sexualidad bajo un velo de sofisticación, y él quería que el espectador descubriese esa sexualidad durante la película. Citando textualmente: «Quería mujeres con aspecto de maniquí, auténticas damas, que se convierten en verdaderas putas cuando ya están en la alcoba».
La primera película considerada dentro del género de Thriller fue el controvertido film “Psicosis” rodada en blanco y negro para aumentar el ambiente sombrío de la historia. Es una película pura, una obra maestra, en la que el espectador no sólo queda impactado por la historia y sus consecuencias, sino también, por la música, fotografía e interpretaciones. El ambiente utilizado en este film conlleva a que el espectador tenga momentos de tensión en los que no sabe qué sucederá, pero la banda sonora ayudan a que sepa en qué momentos la trama comenzara a tomar un giro imprescindible.
Evento a celebrar entre el 4 al 10 de marzo de 2019 en Sevilla que engloba diversas actividades relacionadas con la historia, el patrimonio, la cultura y la ciudadanía.